Zonas francas dominicanas muestran poder como exportado

Zonas francas dominicanas muestran poder como exportado

El mejor negocio que puede hacer República Dominicana como Estado es invertir en el desarrollo del sector zonas francas, pues ha quedado demostrado que esta actividad retorna RD$7.00 por cada peso que se contabiliza en incentivos.

Así lo considera el vicepresidente ejecutivo de la Asociación Dominicana de Zonas Francas (Adozona), José Manuel Torres, quien entiende que las exenciones arancelarias no se deberían contabilizar como gasto tributario. Afirma que los insumos que importa el sector se vuelven a reexportar.

Un informe entregado por Adozona a elDinero establece que República Dominicana está entre los líderes en la generación de empleos formales en América Latina con 165,724, superando a Honduras (146,00), Nicaragua (115,050), Brasil (87,851), Costa Rica (82,086), El Salvador (74,000) y Colombia, que emplea a 67,605 personas en el sector.

Las zonas francas dominicanas también lideran el renglón de exportaciones en la región con US$5,695 millones, superando a Costa Rica (US$4,729 millones), Chile (US$3,710 millones), Colombia (US$3,093 millones), Puerto Rico (US$3,000 millones), Nicaragua (US$2,752 millones) y El Salvador, que exporta US$2,521 millones.

En cuanto a inversión, el sector acumula US$4,474 millones proveniente de Estados Unidos, Unión Europea, Canadá, Brasil, Taiwán y Corea del Sur. En operación hay 665 empresas distribuidoras en 26 de las 32 provincias con una contribución al producto interno bruto (PIB) de RD$117,080.7 millones durante 2017. El crecimiento acumulado ha sido de 43.3% en los últimos cinco años.

Promoción
Lo único que República Dominicana debe hacer, destaca Torres, es establecer una estrategia de promoción más fuerte, aunque reconoció los esfuerzos que hace el Consejo Nacional de Zonas Francas de Exportación (CNZFE), entidad a la que le reconoce por ser la aliada en el sector público. “En otras ocasiones ha habido retos importantes en seguridad jurídica, pacto fiscal, pero yo te diría que ahora mismo la parte de la educación y promoción es donde tenemos más interés de que se trabaje”, sostiene.

Torres afirma que las universidades deberían revisar los pensum para actualizarlos con materias, y en algunos casos carreras, más acorde con lo que demanda la industria local. “Hay un tema fundamental, que es el bilingüismo, que uno de los sectores de mayor potencial de crecimiento es la de centros de llamadas (call center), que ha crecido un 300% en los últimos cuatro años”, explica.

Resalta que la alianza con el Instituto Nacional de Formación Técnico Profesional (Infotep) ha sido muy efectiva, entidad que ha preparado operadores de dispositivos médicos y electrónicos. Indica que cualquier joven que incluya en su currículum uno de estos cursos tiene mejores posibilidades de acceder a un empleo seguro y digno en zonas francas.

A su entender, el establecimiento de relaciones diplomáticas con China abre un gran momento para ir a ese gran mercado a vender las zonas francas como un sector idóneo para la inversión. Afirma que la captación de capitales es una de las principales ventajas que pudiera tener para el país este nuevo escenario diplomático con los chinos. “De hecho, hace un par de meses el presidente Danilo Medina inauguró una empresa de perfiles de aluminio en Monte Plata”, refiere.

“Lo principal para vender es tener un buen producto y yo creo que nosotros tenemos un buen producto. Tenemos una ley muy atractiva y un país con infraestructura de puerto, aeropuertos y vía de comunicación de categoría mundial, así como acceso a los principales mercados”, explica Torres.

Sin embargo, Torres entiende que siempre se puede hacer más en promoción de la inversión extranjera. Afirma que ahora las condiciones están dadas para que el país redoble los esfuerzos y se fortalezca más al CNZFE en materia de presupuesto para la promoción.

Retos y oportunidades
El vicepresidente ejecutivo de Adozona considera que entre los principales retos que tiene el país, a propósito del entorno internacional, es la identificación de nuevos mercados. Esto así, dice, porque el crecimiento de doble dígito en lo que va de año se debe, principalmente, al crecimiento de la economía de Estados Unidos, lo que indica que hay una alta dependencia del comportamiento de este mercado.

Explica que hay un tema por resolver con la frecuencia de barcos porque el volumen de carga ha aumentado, pues mucha de las exportaciones de Manzanillo ahora se están yendo por el Multimodal Caucedo. “No hay espacio suficiente y hay que darle prioridad a los productos perecederos, lo que provoca que productos de manufactura se queden para el siguiente viaje, trayendo dilaciones de una y dos semanas”, plantea.

Respecto a China, sostiene, hay una gran oportunidad para República Dominicana. Afirma que el mercado de exportación es sumamente competitivo. Refiere que la inestabilidad política y económica en otros países, lamentable para ellos, ha beneficiado al país porque algunas de esas inversiones han entrado al país.

Torres afirma que el puerto de Manzanillo es una materia pendiente en cuanto a infraestructura en el país, por considerarlo sumamente necesario. Dice que en las operaciones logísticas hay un gran potencial.

Crecimiento
Según el vicepresidente ejecutivo de Adozona, entre 2010 y 2017 las zonas francas exportaron bienes por US$40,866.8 millones. Cuando se comparan los resultados de hace siete años hay un avance de un 35% en el valor de las exportaciones.

Respecto a las principales actividades de exportación en 2017, el CNZFE destaca que en productos médicos el país exportó US$1,485.4 millones, equivalente a un 26% del total exportado por las zonas francas durante el año pasado. En segundo puesto quedaron las confecciones textiles con un US$1,067.8 millones, es decir, un 19%, seguido de productos eléctricos y electrónicos con monto de US$883.1 millones, equivalente a un 16%.

Las exportaciones de tabaco y derivados también ocupan un importante puesto con US$793.6 millones, un 14%. Mientras, el total exportado en calzados y sus componentes fue de US$391.3 millones, es decir, un 7% del total.

Participación en el pastel
El sector de zonas francas ha experimentado una diversificación notable durante los últimos siete años. En 2010 las confecciones y textiles representaban el 53%, mientras que ahora apenas representan el 19%, según el valor exportado.

Los implementos médicos y farmacéuticos, que hace siete años eran el 7%, ahora son el 26%, mientras que los productos eléctricos y electrodomésticos pasaron de un 12% a un 16% en este período. Tabacos y derivados, como actividad, pasó de 6% a 14% entre 2010 y 2017. Joyería, sin embargo, perdió espacio al pasar de 10% a un 7%.