El Gobierno de Estados Unidos ha informado que el déficit comercial de bienes y servicios del país norteamericano descendió un 2,1% en abril y quedó en un saldo total de 46.200 millones de dólares, la cifra más baja en siete meses, en plena agitación proteccionista del presidente Donald Trump.
En concreto, en el cuarto mes del año, las exportaciones crecieron un 0,3%, hasta los 211.200 millones, mientras que las importaciones bajaron un 0,2%, hasta los 257.400 millones.
Según el Departamento de Comercio, la cifra es inferior a la que preveían los analistas, que habían anticipado un déficit de 48.800 millones de dólares.
Estados Unidos registró un déficit comercial de bienes de 68.300 millones de dólares, que fue parcialmente compensado por el superávit de 22.100 millones en servicios.
En abril, el déficit comercial de bienes con China, muy sensible políticamente debido a las continuas acusaciones de Trump a Pekín de injusto trato económico, aumentó 8,1% hasta los 28.000 millones de dólares.
Por su parte, el saldo negativo con México, a quien el mandatario ha criticado también de manera insistente, se redujo un 29%, hasta los 5.700 millones de dólares.
En el acumulado de los cuatro primeros meses del año, no obstante, el déficit es un 11,5% superior al registrado en el mismo periodo de 2017.
Cabe resaltar que el mandatario estadounidense anunció en marzo la imposición de aranceles a las importaciones de acero del 25% y a las de aluminio del 10%, y la semana pasada decidió suspender la exención temporal que había dado a estrechos socios comerciales como Canadá, México y la Unión Europea (UE), elevando así la tensión comercial internacional.